Rol en vivo

El rol en vivo es una forma de juego de rol que se basa en la actuación e improvisación de los jugadores. A diferencia del rol de mesa, donde los jugadores se sientan alrededor de una mesa y narran las acciones de sus personajes, en el rol en vivo los jugadores se visten y se comportan como sus personajes, interactuando con el entorno y con otros jugadores. El rol en vivo es una forma de teatro interactivo, donde no hay un guion fijo ni un público externo.

El rol en vivo puede tener diferentes temáticas y ambientaciones, desde la fantasía medieval hasta la ciencia ficción futurista, pasando por el terror, la historia o el humor. Los jugadores pueden crear sus propios personajes o elegir entre los que les ofrece el director de juego, que es el encargado de diseñar el escenario, la trama y las reglas del juego. El director de juego también puede intervenir durante el juego para introducir elementos narrativos, resolver conflictos o arbitrar situaciones.

El rol en vivo puede desarrollarse en diferentes espacios y duraciones, desde una habitación hasta un bosque, desde unas horas hasta varios días. Los jugadores deben respetar el ambiente y el tono del juego, así como las normas de seguridad y convivencia. El objetivo del rol en vivo no es ganar o perder, sino vivir una experiencia lúdica y creativa, donde los jugadores pueden explorar diferentes roles, emociones y situaciones.

El rol en vivo tiene su origen en los años 80, cuando algunos aficionados al rol de mesa empezaron a experimentar con formas más físicas y escenificadas de jugar. Desde entonces, el rol en vivo ha evolucionado y se ha diversificado, dando lugar a diferentes estilos y modalidades, como el softcombat (que usa armas acolchadas para simular combates), el murder party (que recrea un misterio criminal) o el freeform (que se centra en la interpretación y la narrativa).

El rol en vivo es una forma de ocio alternativo que tiene muchos beneficios para sus practicantes. Además de divertirse y socializar, los jugadores de rol en vivo pueden mejorar su expresión corporal y verbal, su imaginación, su empatía o su capacidad de resolver problemas. El rol en vivo también puede tener fines educativos, culturales o terapéuticos, al permitir abordar temas y problemáticas reales desde una perspectiva lúdica y participativa.